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Geografía

Características

La superficie de la Provincia es de 29.801 km2, tamaño que equivale a casi el 1% de la superficie total del país. Más de 1.000 kilómetros de fronteras internacionales rodean a Misiones.

Su posición geográfica la convierte en una provincia muy singular. Los ríos Iguazú, San Antonio, Pepirí Guazú y Uruguay constituyen los límites con el Brasil hacia el Norte, al Este y al Sur. Al Oeste, el Río Paraná marca el límite con la República del Paraguay; al Sudoeste, los arroyos Itaembé y Chimiray establecen el límite con la provincia de Corrientes. Pero Misiones también tiene unos pocos metros de frontera seca: la localidad argentina de Bernardo de Irigoyen se conecta por una calle urbana con la vecina brasileña Dionisio Cerqueira.

Sol y lluvias

El clima de la Provincia es subtropical húmedo, sin estación seca. Las lluvias son abundantes durante todo el año y pueden producirse de manera sorpresiva para dejar paso a un sol radiante. Las lluvias varían desde los 1.700 mm anuales al Sudoeste hasta los 2.200 mm anuales hacia el Este. La temperatura promedio anual es de 21° C (70° F). Los días más fríos se registran en junio, julio y agosto, alcanzando en ocasiones temperaturas menores a los 10° C (50° F). Los veranos son calurosos: en los meses de diciembre, enero y febrero se registran temperaturas superiores a 32° C (90° F).

Serranías misioneras

El paisaje misionero está formado por serranías cubiertas de selva, por cerros -como el de Santa Ana (372 metros de altura)-, y valles que dejan ver las copas de los árboles. Las llanuras con suaves ondulaciones se ubican en el Sur y a lo largo de los ríos Paraná y Uruguay. Hacia el centro de la provincia se encuentra un relieve amesetado, cuyas alturas van creciendo hacia el Noreste, alcanzando los 843 m sobre el nivel del mar en las serranías del borde oriental, en la localidad de Bernardo de Irigoyen, cerca de la frontera con Brasil.

Ríos y arroyos

La Provincia posee más de 800 cursos de agua, algunos muy extensos, como el Arroyo Urugua-í, el Piray Guazú o el Yabebirí. Los arroyos nacen en las serranías misioneras y escurren sus aguas formando saltos y cascadas con ecosistemas de gran diversidad biológica, sostenida por la humedad ambiente propia de las lloviznas que producen las caídas de agua. Esta densa red hidrográfica desagua en tres ríos grandes y caudalosos de la Cuenca del Plata: el Paraná, el Iguazú y el Uruguay, que tienen sus nacientes en territorio brasileño.

Suelos rojos

Durante la era Mesozoica se produjeron grandes erupciones volcánicas que cubrieron el Macizo de Brasilia con varias capas de basalto. A estas rocas se las denomina meláfiros y se las encuentra en la mayor parte del subsuelo misionero. La descomposición de estas rocas fue formando el suelo, que resulta de la acumulación de óxidos de hierro y aluminio. Está formado por laterita, roca o tierra constituida por arcilla y sílice que, debido al óxido de hierro que contiene, presenta un color rojizo.

En ciertas partes del territorio, el suelo no es muy profundo y se observan rocas que afloran; en otras partes, el suelo es pedregoso y muy empinado. Precisamente, en los suelos más profundos se ubican las plantaciones de yerba mate, té, las forestaciones y otros cultivos como el tabaco y la mandioca. Los suelos pedregosos se ubican en las partes más altas de las serranías cubiertas por selvas.

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